martes, 25 de junio de 2013

QUEBRANTAHUESOS 2.013

Como previo, quería pedir permiso al lector de este humilde blog que esta crónica quede personalizada en la figura del Mago y en mi persona, Nicolás, ya que fuimos los únicos representantes del VELO y de los TUSINUS en esta mítica prueba. Aunque no se trataba de un objetivo de calendario de ninguno de los dos unas tres semanas de la gran cita, pero por diferentes motivos ahí estabamos los dos en un mano a mano con la épica y la historia, él a por su 5a+1 y yo a por mi 3a+1.
Con nuestros uniformes de gala y una temperatura fresca (más bien fría) se dió el chupinazo de salida, aunque no fue hasta después de 20 minutos que no pasamos por línea de salida. A ritmo de vértigo nos dirigimos a Jaca por la autovía, se notaba que se quería entrar en calor.
Ya en el Somport el sol hizo acto de presencia, preludio de un día espectacular, óptimo para la práctica de éste nuestro deporte.
Así que decidimos tomárnoslo con tranquilidad en esta primera subida. La esperiencia es un grado.
¡Foto Manolo! ¡Sonríe!
Algo de turismo con la Torre de Fusileros antes de Canfran.
Y bonitos paisajes para recordar.

El paso por Somport, coincidente con el primero de los avituallamientos, estaba a tope de partipantes y de público animando. ¡Hasta había una bandera del VELO! El descenso del Somport se puede resumir en una palabra: ¡rapidísimo! y sin darnos cuenta nos metimos de lleno en el ascenso al Maire Blanque.
Carretera estrecha, pendientes y apelotonamiento del personal ... todo fue uno. Pero chino chano cada uno subió el coloso.
Sólo hay que ver la cara del personal para hacerse una idea de la exigencia de las rampas.
En el avituallamiento del Marie Blanque aprovechamos para recuperar fuerzas y reagruparnos, y rápidamente nos tiramos puerto abajo. Desgraciadamente en este descenso nos volvimos a separar los dos y ya no nos reencontramos hasta la línea de llegada.
Dirección a Laruns, base del Portalet y del Aubisque, el reguero de ciclistas es evidente. Los ritmos son altos y el reagurparse se complica.
Ya en Portalet cada uno opta por poner su ritmo como garantía de éxito.
Manolo Mago opta por no parar y hacer toda la subida del tirón.
Y un servidor también había optado por la misma opción minutos antes. ¿Táctica de equipo? ¿O táctica de ciclismo de sensaciones?
Ni el derrumbe de un tramo de carretera fue suficiente para pararnos.
¡Soberbias imágenes las que nos brindó el Portalet en sus últimos kilómetros!
Y sensaciones agridulces y contrapuestas al coronar el Protalet: piel de gallina por los ánimos del público y por el trabajo bien hecho ... pero amargura por ver que esta gran jornada tocaba a su final.
El paso por Hoz de Jaca fue la puntilla final. Desde ahí hasta sabiñáñigo sólo quedaba un suspiro. Ya no había que reservar. Todo estaba hecho.
Al final objetivo cumplido con un crono algo por encima de las 8 horas. La satisfacción del trabajo bien hecho se  notaba. Bravo por Manolo que sin buenas sensaciones se marcó una QH de fábula.
 
¡AUPA VELO Y TUSINUS!